Fuimos creciendo despacio con mucha ilusión y ganas de divulgar una de las ciencias más bonitas y maravillosa del Cosmos: La astronomía. Desde la creación del blog una tarde de un 4 de junio de 2014, se han creado miles de entradas y se ha recorrido medio planeta, llegando a miles de personas interesadas en el Universo. Nuestra satisfacción es que haya un granito de arena en el universo de internet en el que Universo Blog haya llegado a alguien interesado en saber un poco más de la astronomía.
Nuestro entusiasmo se basa en explicar este mundo lo más fácil posible porque el universo en su inmensidad nos encoje el corazón pero nos ilumina con sus noches llenas de miles de estrellas y esa sensación es la que Universo Blog quiere transmitir.
Os dejamos las entradas más vistas de nuestro Blog, y os agradecemos de todo corazón que sigáis nuestro espacio astronómico.
Ahora me voy a coger unos días de vacaciones porque mi estrella y yo nos casamos :), de miles de millones de galaxias, miles y miles de estrellas, aún más planetas he tenido la suerte de que en un trocito de tiempo muy cortito de la edad de Universo, conocer a una de las personas más brillantes y maravillosas del COSMOS.
La sonda Juno en órbita al planeta Júpiter ha capturó en 2019 un hermoso eclipse del Sol sobre el planeta, la sombra de la luna Io creando un círculo casi perfecto sobre las preciosas nubes nubes del gigante gaseoso.
Créditos: Sonda Juno, NASA.
Júpiter tiene un total de 79 lunas (satélites naturales), de los cuales los más importantes son los llamados satélites galileanos, que fueron los que descubrió Galileo en el año 1610. Se trata de Ío, Europa, Ganímedes y Calisto.
Galileo cuando observó estos satélites pensó que se trataban de estrellas, solo al seguir observando y apreciar que cambiaban de posición determinó que se trataban de lunas orbitando el planeta.
Dibujos hechos por Galileo de la diferentes posiciones de los satélites de Júpiter.
La misión de Juno nos está ayudando a entender por qué Júpiter fue de los primeros planetas en formarse. También sí se podría haber formado más lejos del sol antes de migrar hacia el interior del sistema solar y quedarse en su órbita actual. Debido a que Júpiter se formó al mismo tiempo que el sol, sus composiciones químicas deben ser similares. Pero Júpiter tiene elementos más pesados , como el carbono y el nitrógeno , que el Sol. La determinación de la cantidad de agua, y por lo tanto de oxígeno, en el gigante de gaseoso es importante no sólo para la comprensión de cómo se formó el planeta, sino también cómo los elementos pesados se transfieren a través del sistema solar. Estos elementos pesados fueron determinantes para la existencia de planetas rocosos como la Tierra y la vida. Juno nos va a desvelar todos esos misterios.
El otoño de 2019 comenzó este año el 23 de septiembre, exactamente a las 09h50m hora oficial peninsular (España). Esta estación nos durará 89 días y 20 horas, terminando el 22 de diciembre con el inicio del invierno.
Justo en el equinoccio de Otoño las horas de luz duran exactamente igual que las de la noche, 12 h, esto ocurrirá el 25 de septiembre. A partir de ese día se van perdiendo minutos de luz hasta llegar al día más corto del año y la noche más larga, el 22 de diciembre (solsticio de invierno). Además en nuestro hemisferio es ahora Otoño, pero sin embargo en el hemisferio Sur empieza la primavera.
Posición del Sol en la bóveda celeste en cada solsticio y equinoccio, como se puede observar el Sol va bajando su posición en el cielo y cada vez realiza menos trayectoria con lo que se reducen las horas de luz.
En el hemisferio Norte las constelaciones otoñales son muy interesantes, el triángulo de verano empieza a desaparecer (Cisne, Lira y Águila) y empiezan a ascender constelaciones como Pegaso, Acuario, Piscis, Orión, Tauro y Leo.
En esta estación hay tres lluvias de estrellas fugaces muy importantes, la Dracónidas de Octubre (máximo 9 de octubre), las Oriónidas de Octubre (máximo el 21 de octubre), las Leónidas de Noviembre (máximo el 17 de noviembre) y las Gemínidas con máximo de 120 meteoros por hora el 14 de diciembre.
Y para terminar un poco de música:
Concerto n.º 3 en fa mayor, Op. 8, RV 293, «L’autunno» (El otoño) de Vivaldi, de la fabulosa obra para violín y orquesta “las cuatro estaciones”
Disfrutar del Otoño, parece una época triste, llegan las lluvias, se caen las hojas, bajan las temperaturas, menos luz… pero bueno sí se despeja tenemos más tiempo para ver las estrellas y las lluvias nos suelen limpiar la atmósfera y ver con más claridad las estrellas.
Junto a la Vía Láctea hay dos galaxias satelites enanas observables desde el hemisferio sur de la Tierra: La Gran Nube de Magallanes y la pequeña Nube de Magallanes.
La Gran Nube de Magallanes, o LMC, se encuentra muy cerca de nuestra galaxia a tan solo 163.000 años luz y la pequeña Nube de Magallanes a unos 230.000 años luz. Estas pequeñas galaxias son también el hogar de varios conglomerados estelares espectaculares y es un laboratorio ideal para que los astrónomos estudien los procesos que dan forma a las galaxias, ya que están muy cerca y son de muy fácil estudio.
El telescopio VISTA de ESO ha estado observando estas dos galaxias durante la última década. Esta es el resultado de una de las muchas encuestas que los astrónomos han realizado con este telescopio. El objetivo principal de la encuesta VISTA Magellanic Clouds (VMC) ha sido mapear la historia de la formación estelar de las nubes de Magallanes grandes y pequeñas, así como sus estructuras tridimensionales. Créditos: VISTA/ESO
VISTA observa el cielo en longitudes de onda de luz cercanas al infrarrojo. Esto le permite ver a través de nubes de polvo que oscurecen partes de la galaxia. Estas nubes bloquean una gran parte de la luz visible pero son transparentes en las longitudes de onda más largas. Los astrónomos analizaron en detalle alrededor de 10 millones de estrellas individuales en la Gran Nube de Magallanes y determinaron sus edades utilizando modelos estelares. Descubrieron que las estrellas más jóvenes trazan múltiples brazos espirales en esta galaxia.
Pequeña Nube de Magallanes, Créditos: A. Nota (ESA/STScI) et al., ESA, NASA
En la gran Nube de Magallanes hay objetos impresionantes, por ejemplo la remanente de supernovaSNR0519a69,0. Esta remanente se produce cuando una estrella masiva explota.
En la imagen podemos apreciar el gas a millones de grados que ha sido calentado por ondas de choque de las explosiones, observado en rayos X desde el telescopio espacial Chandra (azul). El borde exterior de la explosión (rojo) y las estrellas en el campo de visión se ven en la luz visible captada por el telescopio espacial Hubble. Como veis cuando se unen imágenes de diferentes telescopios se pueden obtener imágenes maravillosas de los objetos astronómicos.
Otro objeto precioso es NGC 1850 es un gran grupo de estrellas, que se encuentra cerca de un grupo más pequeño (por debajo a la derecha en la imagen). El gran grupo tiene 50 millones de años de edad; el pequeño tan sólo 4 millones de años. Se encuentran rodeados de una nebulosidad filamentosa que se cree que se han creado durante las explosiones de supernovas denominado N103B.
NGC 1850 consiste en un cúmulo globular principal (NGC 1850 A) en el centro y un grupo más pequeño (NGC 1850 B) y más joven, compuesto por estrellas muy calientes, azules y rojas más débiles, y estrellas T Tauri. Créditos: NASA, ESA, and Martino Romaniello (European Southern Observatory, Germany).
Con la ayuda del telescopio espacial Hubble se ha detectado por primera vez vapor de agua en la atmósfera de un exoplaneta potencialmente habitable. El exoplaneta llamado k2-18b se encuentra a 110 años luz de distancia y es una super Tierra, su tamaño es dos veces el de nuestro planeta, y por la distancia a su estrella se encuentra en la llamada zona de habitabilidad, una zona en la que el agua podría estar en estado líquido en su superficie.
Impresión artística del planeta K2-18 b, se puede ver a su estrella enana roja y otro planeta acompañante en el sistema. Créditos: ESA / Hubble, M. Kornmesser
El exoplaneta puede que tenga un núcleo sólido de roca o hielo rodeado por una envoltura gruesa de hidrógeno, vapor de agua y otros gases. Encontrado por el telescopio Kepler en 2015, el mundo se encuentra en una órbita de 33 días alrededor de una fría estrella enana roja en la constelación de Leo. Esa estrella brilla con menos del 3 por ciento de la luminosidad de nuestro sol, pero debido a que K2-18 b orbita muy cerca de ella, el exoplaneta recibe un 5 por ciento más de luz estelar que nuestro planeta.
Para determinar su atmósfera se ha utilizado el método del tránsito de detección de exoplanetas, este consiste en observar fotométricamente la estrella y detectar sutiles cambios en la intensidad de su luz cuando un planeta órbita por delante de ella. Esa pequeña variación en el brillo de la estrella fruto del tránsito del Exoplaneta nos puede determinar muchos parámetros, como profundidad de tránsito, tamaño del planeta, atmósfera, zona de habitabilidad.
Curva de brillo en función del tiempo de un tránsito
A partir de la curva de luz del tránsito se determina el cociente de radios planeta/estrella y la inclinación orbital, además de otros parámetros de la estrella y de la órbita. En general, las observaciones de tránsito deben ser complementadas con medidas de velocidad radial para, de este modo, calcular la masa y determinar la naturaleza planetaria del objeto.
Otras aplicaciones de los tránsitos: Determinación de la atmósfera del planeta. Durante el transito y antes de la ocultación el planeta refleja la luz de la estrella y podemos determinar el espectro del planeta y por tanto la composición de su atmósfera. Método muy refinado y complicado pero con muy buenos resultados.
Esto es lo que se ha utilizada para K2-18b, debido a que el planeta transita, parte de esa luz estelar pasa a través de su atmósfera superior en el camino hacia los telescopios, recogiendo y transmitiendo información sobre el cóctel enorme de gases en el aire de K2-18 b.